lunes, 6 de diciembre de 2010

Andrea

Como posiblemente sepan Andrea estuvo alojada en nuestra casa durante algunos días, los cuales fueron profundamente gratos para todos. 

Uno tiende a hacerse una idea de quién es quién cuando lees lo que escribe y por los comentarios y respuestas que deja en otros blogs. Así que para mí, Andrea era una persona muy teórica y muy académica, pensaba que era muy formal por tanta escolaridad.

El jueves nos encontramos en chat y me dice, "llego mañana a Bogotá, puedo quedarme en tu casa?" Y así fue, llegó el viernes, pasado el medio día. Y pues de nada más verla llegar en sandalias, falda vaporosa y camisetas, dice uno que no es tan "formal" como creía. (Claro que en el seminario todos la vieron con su disfraz de profesora : P).  
 
Una mujer profundamente cálida desde todo punto de vista, amorosa, comprensiva, descomplicada, despistada y con un sin fin de historias, teoría y vida para compartir. Hablamos lo que más pudimos y de todo, de los chicos, los esposos, la educación casera, el terremoto, la situación de nuestros paises, el sistema educativo, teorías, pedagogías, etiquetas, paisajes, vacaciones, familia, comida, ¡comida! Aunque el tiempo fue corto hicimos un mediano recorrido por la gastronomía colombiana: ajiaco, tamal, chocolate, caldo de constilla, achiras, arepas, patacón, pan de yuca, buñuelo, helado de paila; y frutas como guanábana (esa chirimoya grande, decía ella), pitaya, granadilla, lulo, curuba, y otras delicias que de momento no me acuerdo. Los chicos quedarón de hacer una entrada conjunta con Andrea para su blog con las frutas colombianas.

Recorrimos el centro; candelaria, san victorino, pasaje rivas, septimazo, la librería Lerner, chorro de Quevedo, centro cultural del libro, mercados artesanales, todo en una tarde para terminar tomando chocolate en La Florida. El domingo desayunamos en la plaza de mercado de Paloquemao, y aunque no pudo almorzar (porque su guatita es pequeña, aunque creo que se le amplio de tanta comida que todos le ofrecimos, jejeje) en la tarde tomamos helado de paila y luego me acompañó a comprar la pala y el azadón para la huerta. Recorrido en trasmilenio de sur a norte y mucha charla. Tinto y aromática a la entrada de la Universidad Nacional y ahí de lleno al seminario.

Quedo profundamente agradecida con la vida por habernos permitido cruzar nuestro camino y espero que nos volvamos a ver. He aprendido de ella unas lecciones que han provocado cambios en mi vida, las cuales agradezco y deseo no olvidar. Gracias Andrea.

7 comentarios:

Silvia dijo...

Qué bonito lo que cuentas de Andrea. Me alegra tanto que la hayas conocido en persona. Es verdad, en Internet nos conocemos, pero no nos sabemos ni tentamos lo profundo. Se vé divina Andrea con tus hijos en este par de fotos. Me conmueve que digas que su presencia te haya cambiado y hecho mejor. ¿Sabes, Zinnia? Hay dichos y citas que no recuerdo quién las dijo pero que dicen que uno debería de ser de una forma que quien te conociera se fuera de tu compañía mejorado, cambiado. Y yo pensaba que eso era realmente sólo en los cuentos y dichos, pero ahora me consta que hay personas así, y que Andrea es una.
Fíjate, sólo ese ratito de veros en Skype y de hablar con Andrea cuando comía chocolatito y yuquita, a mí también me causó una impresión diferente, verdaderamente casera, alegre y muy cariñosa como dices.
Bueno chicas, que me alegro que este seminario os haya acercado, inspirado y transformado.
Besos desde Houston.

Anónimo dijo...

Pucha, escribí la media entrada, de lo más poética agradeciéndote y no se grabó.
La versión corta dice que:
1. internet engaña jajaja y no todo el que habla en dificil es intelectual. ;)
2. Conversamos harto y nos faltó tiempo para seguir hablando.
3. Tu tenias esa foto en que salgo con los 4. Pensé que estaba en mi máquina y no podia encontrarla.
4. ¿como les fue a las niñas en su presentación de ballet?
5. Coordinaremos la entrada de las frutas.
6. Me encanto conocerlos a los 8, incluidos tus papás

Desdemicordilleradelosandes dijo...

Que ganas de ir a Colombia!!! los nombres de las comidas, los colores son para mi exoticos.
Esas construcciones antigua, los letreros de las calles .
Seria lindo conocernos en persona , quine sabe algún día.
abrazos!!!

Anónimo dijo...

Gresi, ya te tocará. Deja de comer ahoritas para que le hagas espacio a la comida colombiana, mira que se come harto y sabroso.

Zinnia Muñoz dijo...

Jajaja! Entonces se te borró la entrada?
Yo creo que si le buscamos el modo yo no veo complicado que algún día podamos reunirnos todas, es sólo ponerle un poco de empeño, contarle el rollo a todo el mundo y buscar opciones.

Un abrazo!

Carmen Ibarlucea dijo...

Ohhh... muero de envidia, en serio.
Que dulce suena todo. Me alegro tanto por ustedes... jajaja... y lo siento tanto por mi!! ... jajaja

Aunque nunca las he mirado a los ojos, siento unos inmensos deseos de abrazarlas.

Zinnia Muñoz dijo...

El encuentro en el seminario fue maraviloso, Janeth, yo también estoy muy agradecida y feliz por haberte conocido. Me pesó no haber podido llegar el domingo a tu casa.

Ipe querida, el 2011 es nuestro año, espero que puedas venir al festival de Buga, pero eso sí, te vienes para Bogotá, y resérvanos varios días, porque tenemos mucho para hablar y tienes toda una lección de vida para compartir y un montón de abrazos que recibir!