Este día hicimos un trabajo muy duro que consistió en quitar el pasto del terreno donde vamos a comenzar a sembrar. Ese pasto es terrible, quitarlo es toda una azaña. Alcanzamos a dejar medio armadas dos camas.
Mirando una chiza, una larva de cucarrón
Nuestros invitados especiales de ese día: Andrea, Claudia y Herson. Coincidió este día de huerta con la visita de Andrea. Claudia y Herson vinieron para asesorarnos en el proceso, además nos surtieron de un importante número de semillas orgánicas de variadas especies.
Para que vean que Andrea vino a trabajar a Bogotá! Estuvo echando pala y azadón con nosotros.
Iryna deshierbando con pose de ballet
Uno de esos compartir que se dan entre los chicos
6 comentarios:
Bellas fotos para un bello proyecto que seguro va a rendir ricos frutos, además de la riqueza de la experiencia misma.
Iryna es tan grácil para moverse. Me maravilla. Yo puedo morir tranquila, ha quedado registro fotográfico que alguna vez hice un trabajo manual.
Me encantó el proyecto de la huerta, con independencia de los vegetales, la sensación de comunidad me gustó mucho.
Gracias Silvia. Estamos con ganas de que así sea. Un abrazo amiga
Jajaja! Trabajo manual, pues sí que sí, ahí quedaste retratada para la historia.
Ver echar azadón a Iryna es todo un espectáculo.
Y tienes razón, "la sensación de comunidad" es muy bonita, nos une el hecho de educar a nuestros chicos y desear que hagan su propio camino, con nuestro apoyo... Pero de ahí en adelante cada familia es tan diferente...! Y eso es muy rico, somos diversos y compartimos una mañana a la semana con un mismo fin. Creo que no me equivoco si digo que todas (las mamás) estamos muy contentas con el proyecto.
Las fotos están muy lindas, me encanta el entusiasmo que traen hasta ahora.
Andrea, si le muestras estas fotos a tu familia te ponen a trabajar y echar pala en tu huerto, jejeje.
Jejeje, ya no podía salirle con cuentos a su negro.
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