Encuentro de tres familias + shampoo, desodorante y crema dental

Es maravilloso que ya seamos casi 60 familias que educamos en casa en Bogotá y sus alrededores, y que tengamos los datos básicos de todos. Eso ha generado diversas posibilidades para encuentros, clases y demás. Uno encuentra afinidades poco comunes en otras familias, lo cual es gratificante, porque con frecuencia nos sentimos bichos raros dentro de los bichos raros, jejeje. Pero con Janneth y con Rosa ha sido un grato encuentro. Ellas ya llevan años de conocerse y frecuentarse. Yo soy la nueva que se suma al grupo - gracias chicas por integrarme ;) -. Coincidimos en muchas cosas como la crianza, la alimentación, el hacer manual, el hacer en casa, el uso racional de los recursos y del dinero; claro, cada una con sus matices, que iguales imposible, y si fuera qué aburrido. Porque precisamente de la 'locura' de cada una es que estamos compartiendo y enriqueciéndonos. La idea es juntarnos dos veces en el mes y compartir todo el día.

Hace ocho días fue nuestro primer encuentro. Nos reunimos acá en nuestro apartamento. Hicimos las onces, pusimos a hacer el almuerzo (Sancocho con pollo campesino y carne), le dimos una vuelta a la huerta (ellas no la conocían), almorzamos y se quedaron muchas cosas en el tintero, que realizaremos la próxima vez (como unos muñecos que ibamos a hacer pero no alcanzamos). El plan central fue hacer shampoo, crema dental y desodorante, todo caserito.

Del shampoo ya les había dejado la receta en esta entrada. Nosotros hicimos el doble de la proporción (10 cucharadas de sal marina, 10 cucharadas de texapon, 2 litros de infusión de manzanilla (o la hierba que prefieran), y haciendo cuentas sale por $3.000 (un dolar y medio, o casi un euro, por dos litros de shampoo), lo cual ayuda a la economía de la casa, verdad? Yo lo utilizo como shampoo, como jabón para lavar pisos y baño, y rendido (1 de jabón por dos de agua) como lavaloza. Hay una forma de volverlo detergente para ropa, en otra ocasión les cuento.

La crema dental es muy sencilla: Pueden coger media tacita de infusión de una hierba que prefieran, una taza de arcilla (debe ser la más fina que consigan, como arcilla para cataplasma), un chorrillo de aceite de ajonjolí (que es bueno para las encías) y unas 10 gotas de aceite esencial que prefieran (puede usarse caléndula para desinflamar, tea tree si hay alguna infección, clavo y canela que también son desinfectantes). Esta que hicimos nosotros fue especial porque además de los ingredientes de arriba, le pusimos cacao molido. Desde hace años vienen diciendo que el cacao tiene la propiedad de combatir la bacteria de la caries, así que nuestra crema fue de cacao con menta, muy buen sabor! Más abajo encontrarán la foto de Cedric moliendo el cacao.

La receta del desodorante es la siguiente: Ingredientes: 3 cucharadas de bicarbonato de sodio, 2 cucharadas de almidón de maíz, 2 cucharadas de manteca de cacao, 2 capsulas de aceite de vitamina E  (pinche y exprima el aceite), Aceite esencial (nosotros agregamos lavanda)
Preparación: Derretir todos los ingredientes (excepto los aceites) y mezclar bien. Esto sólo tardará unos 30 segundos en el microondas o unos 5 minutos al baño de maría. Luego agregar los aceites esenciales, revolver nuevamente y vertir en un frasco, colocar en la nevera para que tome consistencia. La verdad quedó como desodorante en barra, un poco duro para mi gusto, pero ¡funciona! y muy bien. Hay que mejorarle la consistencia.

Moliendo el cacao. Lo compramos en grano, lo ponemos a tostar en un sarten, moviéndolo hasta que comienza a saltar y luego, al molino, que no es tarea fácil.

 Despresando el pollo que estaba muy sabroso.

 La mesa redonda y los caballeros de la cuchara. 8 chicos homeschooler a la mesa